Tratamientos para la madera: evita problemas en tus superficies

Tratamientos de madera

La madera es un material muy empleado en construcción, tanto en pilares como en mobiliario.

Sin embargo, también es uno de los que más sufre con el paso del tiempo, especialmente si se expone a cambios de temperatura. Por este motivo, se deben emplear tratamientos para la madera que protejan del desgaste y la exposición.

En este post veremos cuáles se pueden utilizar frente a distintas problemáticas.

Tipos de tratamientos para la madera

La madera es un material que procede de la naturaleza, lo cual significa que también es permeable a las condiciones ambientales.

Por eso un mueble de madera que se encuentra en el exterior no sufre los mismos daños que uno que se encuentra dentro de casa.

Fuera se expone a la humedad, la lluvia y la decoración causada por el sol, pero en el interior no llueve, así que no habrá problemas de humedad.

Por lo tanto, el tratamiento para la madera exterior no será el mismo que el de interior.

Además, también es un material sensible a los golpes y las rozaduras (¿cuántas veces le has dado sin querer un golpe a la mesa y la marca se ha quedado para siempre?), y es fuente de alimento para insectos como la carcoma o las termitas.

Seguramente estés pensando “vaya, hay que tener mucho cuidado con la madera”, y es totalmente cierto. Por eso existen diferentes tratamientos para la madera con el fin de prevenir daños y reducir la probabilidad de que nuestra madera sufra enfermedades.

Tratamiento contra termitas

Las termitas son unos insectos muy temidos por el gran impacto que pueden llegar a tener.

Son capaces de devorar 5 kg de madera en un día, así que imagínate lo que pueden llegar a causar si no se detectan a tiempo.

Para combatir esta plaga, existen diferentes tratamientos:

  • Tratamiento con aspersión. Se añade insecticida sobre la superficie mediante “gotas”, que penetran con mayor o menor profundidad en la madera en función del producto o sistema que se emplee.
  • Tratamiento con inyección. Se realizan agujeros en la madera a través de los cuales se introduce el biocida a presión.
  • Tratamiento con barreras químicas. Posiblemente la barrera física sea la más efectiva. Alrededor de la madera crean unas barreras perimetrales que impiden el paso de las termitas, y se les hacen unos agujeros en los que se inyecta insecticida.
  • Tratamiento con cebos. En el suelo se colocan estaciones de control que detectan la presencia de termitas y las atacan. Es un sistema bastante eficaz, ya que elimina al completo las colonias de termitas.

Si tienes termitas en tu casa, lo mejor es que acudas a un profesional y él te haga un diagnóstico personalizado.

Tratamiento para hacer la madera resistente al fuego

No es novedad que la madera se utiliza como combustible desde que el ser humano aprendió a hacer fuego por sí mismo. Por eso siempre se ha pensado que no es muy resistente al fuego, y ha estado muy vinculado al concepto de “combustibilidad”.

Sin embargo, esto no es del todo cierto: se han realizado infinidad de ensayos en laboratorio que demuestran que la madera es un material con resistencia ignífuga, y muy seguro frente a incendios.

Algo que corroboran estudios como el realizado por Asomas, la asociación de fabricantes de ventanas. De hecho, para potenciar su resistencia, se han desarrollado retardantes ignífugos que hacen posible su adaptación ante las exigencias técnicas de un posible incendio.

En el mercado se pueden encontrar diferentes barnices ignífugos para madera y derivados de la madera. Son productos traslúcidos que se deben aplicar en dos capas para garantizar una completa protección ante las llamas y el calor.

Tratamiento contra la humedad

La madera es un material poroso que absorbe agua, por eso uno de los agentes más peligrosos para la madera es la humedad, puesto que el agua la puede dañar o aumentar el riesgo de daño. Además de favorecer la aparición de hongos, también origina la famosa mancha azul.

Aunque hay unas maderas más resistentes que otras a la humedad, existen productos que permiten aumentar la impermeabilidad:

  • Existen ceras (que pueden ser de abeja, vegetales o sintéticas) que, además de embellecer y ofrecer un efecto de pátina a la madera, protegen de los rayos del sol.
  • También hay aceites que sirven para nutrir y resaltar la madera, sin modificar su acabado. El aceite de linaza, que procede de las semillas de lino, o el aceite de teca.
  • Los barnices también sirven para tapar el poro de la madera y evitar que la humedad penetre. Se recomienda sobre todo para madera de interior, ya que es más fácil de limpiar y previene la aparición de manchas. Si la madera es exterior, también hay barnices especiales.
  • El lasur es un compuesto a base de resinas elásticas que no tapan el poro de la madera, por lo que resulta idóneo para exteriores.

Cuidados posteriores a tratamientos de la madera

Después de haber sometido algún tipo de tratamiento para la madera como los que hemos visto en líneas anteriores, es conveniente realizar una serie de cuidados que prolonguen sus beneficios:

  • Limpieza regular con un cepillo suave o un paño húmedo. Es importante mantener la madera limpia y libre de suciedad y polvo. Es aconsejable evitar productos de limpieza abrasivos que dañen el tratamiento que se ha aplicado.
  • La madera debe permanecer seca. Tanto en interior como en exterior, la madera debe permanecer seca, así que, si ha caído lluvia encima de ella, hay que actuar con rapidez para que no se formen manchas de humedad o moho.
  • Revisar con regularidad el estado de la madera. Aunque realicemos los pasos anteriores, conviene revisar con regularidad el estado de la madera para comprobar que no hay daños profundos o termitas. En caso de que haya agujeros o zonas debilitadas, habrá que contactar con un especialista para buscar una solución adecuada.

Cada caso es diferente, por eso aconsejamos seguir las indicaciones especificadas por el fabricante del tratamiento de madera que se va a aplicar, y, en caso de duda, buscar la ayuda de un profesional.

DH