Tarimas de madera para piscinas

tarimas dde madera para piscinas

Disponer de una piscina en la que refrescarse durante los días más calurosos del verano es siempre una ventaja. Sin embargo, acceder a este tipo de ocio exige una inversión inicial y un mantenimiento adecuado.

Por ello, es importante tener en cuenta una serie de decisiones iniciales que marcarán la durabilidad y la vida útil de nuestro particular rincón de descanso y diversión. Elegir una buena tarima de madera para la piscina es tan relevante como apostar por una piscina enterrada o decantarte por un sistema de filtración u otro.

Con el objetivo de poder planificar la construcción de nuestra piscina, eligiendo los materiales más duraderos y longevos en el tiempo, en las siguientes líneas vamos a analizar cuáles son las ventajas de elegir una tarima de madera para nuestra piscina.

¿Cuáles son los beneficios de apostar por la tarima de madera natural para la piscina?

La demanda de suelos de madera para piscinas se ha disparado, entre otras cosas, porque se trata de un material duro y resistente a las condiciones meteorológicas. Igualmente, y dado que la tarima que rodea a la piscina debe garantizar la seguridad de los usuarios, conviene prestar atención al tipo de madera escogido. Es importante optar por un acabado antideslizante, que garantice la seguridad y que, a su vez, no se agriete para evitar cualquier tipo de riesgo. Hay que tener en cuenta que su uso está indicado para que los usuarios caminen descalzos por estas superficies.

¿Cómo es la tarima de madera más habitual?

En estos casos, se trata de suelos laminados o estriados con un grosor mínimo de 2cm, aunque cada vez más se ven baldosas de madera de 50×50. La elección de una u otra opción es indiferente desde la perspectiva de la calidad. Se trata más de una cuestión de gustos.

Respecto al origen de la madera en sí misma, lo más recomendable es decantarse por maderas exóticas debido a que tienen una alta densidad, son duras y resisten bien a los productos químicos o la radiación solar.

¿Cómo se instala el suelo de la piscina?

Una vez elegido el tipo de madera y el formato de tarima que más nos encaja, debemos tener presente cuál es el estado de la superficie sobre la que queremos colocar la tarima de la piscina. Por ejemplo, es básico que se trate de un terreno estable y con una inclinación nunca superior al 1% hacia la zona del desagüe. De lo contrario, podemos sufrir encharcamientos que aumentarán los riesgos de caminar sobre la tarima de madera.

Igualmente, lo ideal es que la tarima de madera quede perfectamente enrasada respecto al vaso para eliminar posibles riesgos derivados de tener diferentes niveles o escalones.

Por último, conviene tener presente que es importante dejar una separación entre las tablas o baldosas de la tarima para, así, favorecer el drenaje del agua y permitir posibles dilataciones del suelo. Lo aconsejable es que tal separación no supere los 3cm de anchura para evitar también posibles tropezones.

¿Qué cuidados necesita una tarima de madera para piscina?

Tan importante es elegir una madera duradera y de buena calidad, como conocer el mantenimiento adecuado para que perdure la mayor cantidad de tiempo posible en buenas condiciones.

La tarima de madera para piscinas debe ser tratada con protectores y lasures de poro abierto. Asimismo, los aceites naturales para tratar suelos de exterior son muy recomendables antes de que den comienzo las dos estaciones en las que la madera más erosión sufre: el invierno como consecuencia del frío y, en verano, por la inclinación del sol más baja.

Como detalle a tener en cuenta, es importante fijarse en el estado de la madera antes de aplicar los productos de mantenimiento, ya que en ocasiones puede necesitar un lijado parcial para que los principios activos penetren en condiciones.

El caso del decking de castaño: una alternativa duradera y sostenible

Las tarimas de madera de castaño para piscinas son una opción a considerar dado que se trata de una madera que puede conseguirse a nivel nacional y no necesariamente se trata de un material de importación, lo que reduce la huella de carbono del producto y, por lo tanto, lo hace mucho más sostenible.

Las opciones de decking de madera de castaño disponibles van desde los 3000 mm de largo hasta los 6000 mm y, respecto al ancho, desde 100 mm hasta los 160 mm. Desde el punto de vista del grosor, la tarima de madera de castaño tiene un espesor de 2,1 cm.

A la hora de elegir una tarima de madera de castaño para nuestra piscina conviene tener presente que, al igual que sucede con otras maderas naturales, la exposición al exterior cambiará gradualmente su aspecto. Es aconsejable realizar mantenimientos y cuidados con aceites o lasures especiales para exterior.

Por último, pero no por ello menos importante, existe la posibilidad de decantarse por una tarima de madera sintética más económica, aunque el resultado nunca será el mismo. A pesar de que a nivel estético puede ser similar durante los primeros años, con el paso del tiempo su aspecto se verá modificado. Es precisamente por esta razón por la que los expertos recomiendan apostar por maderas naturales en la medida de lo posible.

DH