Eficiencia térmica y sostenibilidad: madera de castaño en la construcción de edificios duraderos

Eficiencia térmica de la madera aplicada en construcción de edificios

Hoy más que nunca, la construcción sostenible ocupa un lugar central en las conversaciones sobre el futuro de la arquitectura. Alcanzar los objetivos de descarbonización global no es una tarea sencilla, requiere materiales que aporten eficiencia energética, reduzcan el impacto ambiental y cuenten con un diseño atractivo.

En este marco, la madera se posiciona como una de las grandes aliadas de la bioconstrucción, destacando no solo por su sostenibilidad, sino también por su eficiencia térmica. Gracias a su capacidad para aislar tanto del frío como del calor, la madera se convierte en un material clave para diseñar espacios más confortables y energéticamente eficientes.

Entre las propiedades de este recurso natural sobresalen sus excelentes condiciones aislantes y su durabilidad, especialmente en especies como la madera de castaño. En este post, analizaremos las ventajas que ofrece esta madera para afrontar los desafíos de los edificios del mañana.

 

 

La madera en la eficiencia térmica: propiedades naturales para un aislamiento eficaz

El aislamiento térmico de la madera es, sin duda, una de las características más valoradas de este material natural. Y no es para menos: su capacidad para actuar como barrera térmica es hasta cinco veces mayor que la del ladrillo. A esto se suma su ligereza, que trae consigo importantes ventajas, como la reducción del tamaño de la cimentación y el grosor de los muros.

La combinación de la madera con otros materiales está dando lugar a resultados exitosos, como los sistemas constructivos híbridos. En este caso, la madera se integra con materiales como la piedra o el hormigón para aportar inercia térmica y reducir el consumo de energía. Esta visión está abriendo el camino hacia edificaciones más sostenibles y energéticamente eficientes.

 

Madera de castaño: durabilidad y sostenibilidad en un solo material

La inversión en madera de castaño no solo ofrece una alternativa sostenible, sino que se traduce en estructuras que conservan sus propiedades mecánicas y estéticas durante generaciones. Un claro reflejo de esta durabilidad son los emblemáticos hórreos tradicionales, presentes en gran parte del norte de la península ibérica. Algunos de estos hórreos, testigos de siglos de historia, alcanzan casi los 400 años de antigüedad.

En esta línea, la resistencia y durabilidad de la madera de castaño son dos de sus principales virtudes, que la hacen destacar frente a otros materiales. Su baja tendencia a la deformación le confiere una estabilidad dimensional sobresaliente; lo que la hace especialmente adecuada para soportar las fluctuaciones de temperatura y humedad sin perder sus propiedades. Además, la producción de esta madera genera menores emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con recursos como el acero y el cemento.

Una de las grandes ventajas de la madera de castaño en la construcción es que, al finalizar su vida útil, puede ser reciclada o descompuesta de manera natural. Este proceso contribuye a reducir los residuos en los vertederos.

 

Ventajas ecológicas de la madera: un eficaz sumidero de CO2

La construcción en madera se perfila como una respuesta viable para mitigar los efectos del cambio climático. Según la organización Architecture 2030, los edificios representan una de las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero, siendo responsables de entre un 30% y un 40% de estas emisiones a nivel global. En países como Estados Unidos, este sector llega a producir aproximadamente un 44,6% de las emisiones de carbono, una cifra alarmante que subraya la urgencia de encontrar alternativas más ecológicas.

Una de las soluciones más prometedoras para reducir el impacto ambiental de la construcción es el uso de materiales menos perjudiciales. Es aquí donde entra en juego la madera. Gracias a su proceso natural de fotosíntesis, los árboles actúan como eficientes sumideros de carbono, absorbiendo grandes cantidades de CO2 y almacenándolo en forma de madera. De hecho, cada metro cúbico de madera es capaz de atrapar hasta 0,9 toneladas de CO2.

En este contexto, la madera se presenta también como un material ideal para viviendas diseñadas bajo criterios de eficiencia energética, como las casas pasivas. Estas viviendas, que priorizan la sostenibilidad y el confort térmico, aprovechan las propiedades aislantes de la madera, su resistencia frente a la humedad y su alta calidad estructural para reducir tanto el consumo energético como el impacto ambiental.

 

Aplicaciones prácticas del castaño en la arquitectura sostenible

En Grupo Siero nos especializamos en el trabajo con madera de castaño, un recurso que combina durabilidad, estética y sostenibilidad. Nuestra experiencia nos ha permitido participar en proyectos emblemáticos que representan el futuro de la arquitectura sostenible.

Un ejemplo destacado es nuestra colaboración en el edificio Ombú de Acciona, un referente en rehabilitación sostenible en Madrid. Allí suministramos vigas laminadas de castaño certificadas con los sellos FSC® y PEFC, asegurando un origen responsable y respetuoso con el medio ambiente. Este proyecto no solo revitalizó una construcción histórica, sino que integró materiales naturales que reducen la huella de carbono y mejoran la eficiencia energética del edificio.

 

 

DH